Para esta vivienda buscábamos un estilo muy carácterístico: un clásico moderno, con tonos claros, pero cálidos y acogedores, y con algún detalle en negro que contrastara. Y, sobre todo, buscando una excelente relación calidad precio.
Empezando por salón comedor diseñamos el espacio colocando los sofás Sam de Atemporal, en un tejido con una excelente limpieza y en un tono claro medio. Los originales sillones Mabel de Bizzoto, caracterizados por tener el asiento y el respaldo en ratán natural, y la estructura en madera de teca en negro. Las mesas, de centro y escritorio, de Olut, acabadas en su mítico “Roble Olut” y con las estructuras en metal lacado en negro. Y una mesita auxiliar de VP Interiorismo, de fresno en negro mate.
Para el comedor, se contó con Tadel, para la mesa. Concretamente la July, la cual, una de sus opciones se caracteriza por sus elegantes patas de cristal, en cruz; y en este caso, se completó con un sobre recto en nogal. Y las sillas Anika de Somcasa, acabadas en beige.
La cocina, por su parte, se completó con mobiliario de Inclass. Los taburetes Varya, en negro, combinando con la fantástica encimera. Las sillas Aryn, en colores verde, mostaza y negro. Se eligieron dos de cada color, creando un diseño muy original. Y la mesa Essens, con el pie en negro, y el sobre en roble.
Por último, respecto a las zonas de noche, el dormitorio principal se diseñó con el cabecero Rim de Casual, tapizado en la tela Gretta y color crudo.
Era muy importante que, aunque de distintas marcas, el canapé no desentonara con el cabecero. Finalmente, el canapé Aruba de Astral, quedaba perfecto!
El dormitorio se completó con el colchón Tardor, también de Astral, y dos mesillas de Olut, en su acabado “Piedra”.
Para los dormitorios de las tres niñas se buscaban diseños iguales y en tonos neutros. Para ello elegimos camas nido de Glicerio Chaves, y unos fantásticos colchones de Somilar Caballero, tanto para la cama de arriba como para el arrastre.
Por último, para el dormitorio de servicio se eligió una base tapizada en negro y un colchón también de Somilar Caballero, que junto con la estética del espacio, generó un diseño muy especial.